LA RADIO POPULAR EN AMÉRICA LATINA
ENTRE LO GLOBAL Y LO
LOCAL
Una
nueva forma de comunicación para la población Latinoamericana nace en la década
de los setentas, cuando surgen las famosas radios populares. En el Perú, por
ejemplo, las primeras emisoras con licencia educativa nacieron en la iglesia
Católica, inicialmente vinculadas a su trabajo pastoral, con una marcada línea
clerical con equipos y tecnología muy pobre, pero a pesar de todo hicieron
posible un modo de expresión y vocación democrática. Estas radios, permitieron
que la comunicación popular sea una
acción diferencial, transformadora y de liberación, que respondería a la participación de los
integrantes de la comunidad tanto en el proceso de la comunicación en sí, como
en la determinación de los objetivos.
Las primeras
emisoras con licencia educativa nacieron en la iglesia Católica, inicialmente
vinculadas a su trabajo pastoral, con una marcada línea clerical con equipos y
tecnología muy pobre. Es el caso de Radio la Voz de la Selva, Onda Azul,
Convención y Marañón. La excepción en esta lógica que manejó la iglesia la
constituyó Radio Unión, una de las emisoras de alcance nacional en el país que
originalmente perteneció al Arzobispado de Lima y que posteriormente pasó a
manos privadas.
La radio
popular, ha pretendido siempre adentrarse en la realidad y contradicciones de
las comunidades populares para buscar, desde su origen, las mejores opciones de
organización política y cultural, que aumenten la eficacia de las prácticas
comunicativas habituales. Ha tratado de constituirse en un espacio democrático
y participativo, donde los sujetos tradicionalmente excluidos de la toma de
decisiones puedan colaborar directamente en la creación de formas nuevas y
contenidos innovadores, de acuerdo con el mismo proceso de cambio social que
propician estas intenciones. Se puede decir entonces que ha venido forjando con tesón y talento una radiodifusión del
pueblo, por el pueblo y para el pueblo.
Somos
parte de un nuevo milenio, donde la globalización abarca todos los sistemas de
acción de la sociedad. Para muchos, este proceso ha generado expectativas de
riqueza común, pero la realidad es otra, solo los grandes saldrán beneficiados,
aquellos que poseen las colosales industrias y empresas que mueven al mundo.
Ante esto, las radios populares reafirmaran sus ideales, y lucharán contra un
proceso que perjudica en su mayoría a la comunidad en general.
En
esta conmocionada época, las radios populares se enfrentan a sectores de acción
(economía, política, sociedad, cultura, etc) modificados, a los cuales tendrá
que conocer a fondo, para hacer frente o complementarse. Se vive en un periodo
donde está surgiendo la democracia, como modo de gobierno, dejando de lado la
violencia, para resolver las situaciones problemáticas con dialogo y
diplomacia. Ante esta situación se han generado asuntos de interés colectivo,
lo que incitaría a la radio popular a abrir espacios de discusión y consenso
entre los ciudadanos que deseen expresarse sobre los mismos.
La
sociedad, ha abierto sus ojos ante un mundo que cada día crece pero no se
desarrolla; apoyado por funcionarios corruptos que sólo buscan beneficio
personal y no el bien común, que permita el progreso de la población. Por tales motivos la ciudadanía, busca
difundir programas, que estimulen a
todos a luchar por obtener una mejor calidad de vida; pero no actúan
solos, ahora se han afianzado de considerables asociaciones las cuales marchan
hacia un mismo objetivo. Así pues, vemos que se trata de una población activa,
que toma fuerza día a día, buscando una transformación democrática dentro y
fuera del ámbito donde coexisten.
Con la
ventaja de encontrarnos en la era de las telecomunicaciones, la radio popular
puede llegar a más lugares a nivel mundial, dando a conocer los objetivos que
han hecho posible su existencia. Pero, el actuar sin límites utilizando la
tecnología en exceso; podría impedir que la radio popular siga manifestándose
en su propuesta de inicio y perdiendo su identidad.
Para
este siglo, la radio popular está llamada a
proponer un cambio de desarrollo social, vaya de la mano con la
contribución y participación de la sociedad. Tendrá que presentarse como un
medio de concertación entre el estado y la población, además deberá responder a
los requerimientos de su público, en la mejora de su calidad de vida y en el
reforzamiento de su identidad cultura.
Lo que
se busca es trascender, ir más allá de lo esperado formando redes de radios populares que
reanimen a la sociedad civil a ser parte del cambio; una unión colectiva
dirigida a fines comunes. Esto se lograría través del fortalecimiento de las
corrientes de opinión, las estrategias recuperación de la identidad nacional y la programación de
temas que traten sobre la mejora de vida de las personas.
Accionar
en apoyo de las demás emisoras, implica dar a conocer los diferente puntos de
vista a nivel global, sin dejar de lado la función local que cumple la radio
popular. Pues bien, ante el periodo globalizado que se vive, la radio popular
actuando conjuntamente con distintas emisoras a nivel mundial, permitiría fortalecer sus ideales y aprender todo lo
bueno que viene de afuera. Las radios que se atreva a dar este gran paso, durante
todas las generaciones.
Cinthya,
ResponderEliminarEs coherente y propositivo lo que escribes, pero como que falta un sello personal.